Escribe: Universidad Bolivariana
Los viejos robles mueren de pie. Relato autobiográfico de un policía leal
Libro de Editorial Universidad Bolivariana lanzado recientemente en la Fundación Salvador Allende.
El Sábado 17 de Abril se realizó en la Fundación Salvador Allende el lanzamiento del libro editado por la Universidad Bolivariana “Los viejos robles mueren de pie. Relato autobiográfico de un policía leal”, libro testimonial de Juan Seoane, quien era el jefe del grupo de detectives de la Guardia Presidencial que acompañó y defendió a Salvador Allende en la Moneda desde su fidelidad al mandato constitucional de defender al presidente de Chile.
El origen del título es una frase del Presidente Salvador Allende, cuando libera a los detectives de la Guardia Presidencial para que se retiren de La Moneda, y el Jefe de la Guardia, Juan Seoane, le contesta que “No”, a lo que el Presidente Allende responde: “Juan, los viejos robles mueren de pié”.Presentaron el libro el doctor Patricio Gijón, quien también acompañó al presidente ese día del golpe militar en la Moneda, y el académico Federico Galende, quien colaboró en la elaboración y prologó el libro.
Por la Fundación estuvo su Directora Ejecutiva, Patricia Espejo Brain, y por la Universidad Bolivariana su Vicerrector Académico Sergio Burquez, quién inauguró el acto de lanzamiento con un saludo a nombre de la Universidad Bolivariana y su Editorial, y agradeció al autor haber elegido a la UB como editora de su libro.
Asistieron también la Embajadora de la República Bolivariana de Venezuela, María Lourdes Urbaneja, y el Consejero de Prensa de la República de Cuba, Juan Fernández. La Embajadora de Nicaragua, María Luisa Robleto, escribió un nota muy cariñosa, señalando que “Juan Seoane, quien fue acompañante y compañero del Presidente Salvador Allende, también fue protagonista de la resistencia y del exilio de muchos de chilenos en Nicaragua.
Su paso fundacional por la Policía y el Ejército Sandinista así lo atestiguan. Su recuerdo y aporte revolucionario permanece en nuestra memoria junto al agradecimiento imperecedero”.Acompañaron al autor miembros de su familia, compañeros de la Policía de Investigaciones que se quedaron también cumpliendo sus funciones en La Moneda, miembros del GAP y numerosas personas vinculadas a la Fundación Salvador Allende y a la Universidad.
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